El pasado 13 de octubre desde Uribia, La Guajira, el presidente Iván Duque anunció que durante su gobierno se implementará un programa gracias al cual “las energías renovables van a pasar a representar el 10% de la capacidad energética de Colombia”.
En el taller “Construyendo País” que se llevó a cabo el Ministerio de Minas y Energía se comprometió a brindarle acceso a energía eléctrica a 35.000 hogares que carecen de ella en La Guajira. La ministra María Fernanda Suárez dijo allí que en el cuatrenio se van a desarrollar al menos 14 proyectos de energía renovable que van a generar hasta 5.000 empleos temporales.
Pocas horas después, la página web de la presidencia publicó un comunicado diciendo que el gobierno había lanzado un ambicioso programa de energía renovable, que lamentablemente aún no se encuentra en internet. Sin embargo todo apunta a que dicho programa navega sobre la ola de las renovables que surgió en los últimos años.
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Es fácil constatar que los proyectos de generación se dispararon entre 2017 y 2018. En el caso de la generación solar fotovoltaica hay 2.467 MW representados en 196 proyectos registrados en la UPME que apenas están en fase 1. En la actualidad, los proyectos en fase 3 son 21 y apenas suman 34 MW, por lo que el verdadero boom de las renovables aún no se ha materializado.
En lo que toca a La Guajira, donde se va a generar la mayor parte de los 1.500 MW anunciados por el gobierno, el año pasado la UPME le adjudicó al Grupo de Energía de Bogotá el proyecto para construir la Subestación Colectora 500 kV y dos líneas de transmisión a 500 kV (Colectora – Cuestecitas y Cuestecitas-La Loma).
Con esta infraestructura se podrán viabilizar los 20 proyectos eólicos registrados en la UPME (15 de ellos en fase 1) y muchos más que se desarrollen en el departamento. Pero el proyecto de transmisión eléctrica, con un costo de 174 millones de dólares, en realidad hace parte del Plan de Expansión de Referencia y Generación y Transmisión 2015-2029 de la UPME.
El impulso que da el gobierno
Aunque el gobierno realizará la primera subasta que ofertará contratos de energía limpia a largo plazo en enero de 2019, aún no hay un plan energético claro que señale el derrotero en cuanto a la diversificación de la matriz energética. Esta sería una de las razones por las que el profesor de la Universidad Humberto Rodríguez dijo en la pasada Feria Expo Renovables, al frente de un auditorio lleno de expertos, que “nos está cogiendo la tarde ante el problema de generación que se presentó en Colombia con el retraso de HidroItuango”.
Precisamente, uno de los beneficios de diversificar la matriz con energía limpia es contar con generación de apoyo para evitar depender de las hidroeléctricas y soportar las sequías que puedan amenazar la oferta de energía.
Aún se está a la espera de conocer un plan estratégico del gobierno –o un documento CONPES– para aumentar la generación con energía limpia, como lo prometió el presidente en su campaña. Por la cantidad de proyectos inscritos ante la UPME se puede anticipar que durante su gobierno en efecto habrá un crecimiento jamás visto de generación con fuentes renovables no convencionales.
Foto Portada: El Heraldo
